Mercedes-Benz decomisó más de 1.6 millones de piezas falsificadas a escala internacional durante el año pasado, como parte de sus medidas de seguridad para garantizar la calidad de sus vehículos.
La compañía señaló, como ejemplo, que en mayo y junio de 2023 se confiscaron filtros de aire de papel, que pueden provocar accidentes graves tras su instalación, así como piezas de freno, ruedas, carrocería y dirección falsificadas, mismas que se destruyeron.
Tan solo durante el año, en coordinación con diversas autoridades, realizaron 740 redadas en todo el mundo, cifra 20 por ciento mayor en comparación con el año anterior. A su vez, los protectores de marca eliminaron más de 142,000 ofertas de productos falsificados y contenidos que vulneraban los derechos de marca.
«La industria de la falsificación genera enormes márgenes de beneficio y tiene estructuras de crimen organizado. Pone en peligro la seguridad vial, no respeta el medio ambiente, no defiende ni los salarios justos ni la seguridad laboral. No hay controles de calidad», afirmó Renata Jungo Brüngger, miembro de la junta directiva de Mercedes-Benz.
«Al actuar consecuentemente y con todos los medios legales contra estas estructuras altamente criminales, no sólo protegemos la reputación de nuestra marca, sino también a nuestros clientes, a otros usuarios de la carretera y, en definitiva, a todas las víctimas de la industria de la falsificación. En estrecha colaboración con las autoridades, pudimos localizar directamente a muchas fábricas de falsificación”.
Pese a los esfuerzos, la compañía admitió que rastrear los envíos de piezas falsificadas es una tarea monumentalmente difícil, debido a que algunas piezas falsificadas se han vuelto tan exactas que puede resultar difícil distinguirlas de las auténticas, por lo que un equipo especial dentro de la empresa debe verificar su autenticidad.
Para identificarlas, los protectores de marca de Mercedes-Benz comprueban ofertas en sitios web, investigan señales y realizan una investigación para identificar las fábricas de los falsificadores. A la postre, el equipo pone los resultados a disposición de las autoridades correspondientes para que realicen los registros.
La firma también advierte el alza en el uso de plataformas en línea y redes sociales para distribuir productos falsificados a gran escala, aprovechando el amplio anonimato y la naturaleza descentralizada de los mercados.
Para que el público no caiga en la trampa de productos falsificados, Mercedes-Benz recomienda hacer un examen minucioso de las ofertas llamativas. Si los precios son significativamente más bajos, o hay anomalías en la calidad del producto o ventas, es una señal de que no es auténtico; incluso, se pueden ver a través de imágenes o denominaciones, como por ejemplo, si la marca no fabrica estos productos por sí misma.
Mercedes-Benz no es el único fabricante que busca proteger su propiedad intelectual. Hace algunas semanas, Ferrari presentó un programa para incentivar la identificación de actividades que infrinjan las marcas registradas de su marca, ofreciendo recompensas a las personas que denuncien posibles infracciones en este sentido.