La calidad de un vehículo es un aspecto bajo constante escrutinio por ser un tema de seguridad, el aspecto que más se debe tomar en cuenta al adquirir una unidad.
Más allá de lo estético o el alcance técnico que pueda tener, la protección que ofrezca un auto debe ser una prioridad para el público, en especial el mexicano, considerando la cantidad de accidentes que ocurren en México y sus causas.
Según el Inegi, sólo el 1 por ciento de los siniestros se deben a fallas de los coches, mientras el reporte más reciente de la AMDA afirma que el número de órdenes de reparación en promedio por concesionario bajó 15.5% para quedar en 1,877, aunque el promedio de cada uno subió de 3,533 a 3,637 pesos.
Las marcas de origen chino están siendo conscientes para priorizar la calidad y satisfacer a sus clientes. A partir de ahora, Chirey y el Centro de Experimentación y Seguridad Vial México (CESVI) están colaborando para realizar investigaciones que se enfoquen en la optimización de sistemas de seguridad para los vehículos de la marca de origen chino y en la eficiencia para ser reparados.
Con ello, el objetivo es mejorar los servicios de posventa en nuestro territorio.
“Agradecemos profundamente a CESVI MÉXICO por su colaboración y profesionalismo en este proyecto. Esta alianza refuerza nuestro compromiso con la seguridad de nuestros clientes y la calidad de nuestros vehículos», afirmó Diana Rodríguez, Directora de Marketing y Comunicaciones de Chirey.
“Mediante estas investigaciones, buscamos optimizar nuestros sistemas de seguridad, procesos de reparación y servicios posventa, garantizando siempre la mejor seguridad y experiencia para quienes confían en nuestra marca».
El 12 de noviembre se llevaron a cabo pruebas de impacto/colisión a baja velocidad de la Tiggo 2 Pro de Chirey, uno de los productos referente y de los más vendidos de Chirey, en las instalaciones de CESVI MÉXICO, en Toluca, Estado de México.
Estas pruebas se realizan conforme al estándar internacional RCAR e incluyen impactos frontales y traseros a velocidades equivalentes de aproximadamente 30 km/h.
La meta final es identificar riesgos referenciales de daño y reparación para los fabricantes, con base a los costos de reparación derivados de pruebas estandarizadas, el tiempo de mano de obra, materiales y disponibilidad de refacciones, según cada segmento.
Esto también permite relacionar el costo de la reparación con el precio del vehículo y analizar el comportamiento de diversos elementos de seguridad pasiva y activa. Estas pruebas siempre son en colaboración con las aseguradoras de México.
«Este encuentro marca el inicio de un acercamiento estratégico muy importante para ambas compañías. En CESVI MÉXICO nos especializamos en las mejores prácticas de reparación por colisión y en procesos de vanguardia para devolver a las calles vehículos siniestrados con total seguridad. Colaborar con Chirey, una de las marcas líderes de origen chino en el mercado mexicano, representa una gran oportunidad de negocio y desarrollo», dijo Augusto Bagase Rejón, Director general de CESVI MÉXICO.