La Comisión Europea anunció una nueva inversión de 200 millones de euros para impulsar al sector de fabricación de baterías de la Unión Europea.
Esta garantía de préstamo hecha por el Banco Europeo de Inversiones (BEI) se suma a los mil millones de euros de subsidios que la región también realiza para apoyar proyectos de fabricación de celdas de baterías de vehículos eléctricos a través del Fondo de Innovación.
El BEI prevé invertir otros 1,800 millones de euros en la cadena de valor más amplia de las baterías, con lo que se totalizarán 3,000 millones de euros de apoyo público para el desarrollo de la industria europea de baterías.
Dicho apoyo cubre el desarrollo de materiales avanzados, la fabricación de componentes o técnicas nuevas de reciclaje, además de priorizar las innovaciones tecnológicas más allá del ensamblaje básico de celdas o paquetes.
Asimismo, el BEI llevará a cabo un proceso de solicitud periódico para evaluar si una operación es elegible según los criterios complementarios definidos, así como la viabilidad comercial y técnica del proyecto, apoyando así la cadena de valor de las baterías, incluidas las materias primas, la investigación, la producción, la infraestructura de carga y el reciclaje.
«Europa está en camino de convertirse en el primer continente climáticamente neutro para 2050. La producción de baterías es una prioridad para la transición a la energía limpia en los sectores del transporte y la energía y más allá», destacó Wopke Hoekstra, Comisario de Clima, Net Zero y Crecimiento Limpio.
«La Comisión Europea se ha comprometido a movilizar inversiones muy necesarias en tecnologías de vanguardia para apoyar un sector europeo de baterías resiliente. Estamos combinando diferentes instrumentos financieros para orientar nuestro apoyo de la manera más eficiente y maximizar la inversión privada. La asociación con el BEI ayudará a las empresas y los innovadores de la UE a aprovechar los beneficios de las tecnologías innovadoras de emisiones netas cero».
En los últimos seis años, el Banco ha proporcionado 6,000 millones de euros de financiación al sector, con lo cual se busca fortalecer una economía circular y reducir el impacto ambiental de las baterías, cumpliendo con los objetivos descritos en el Pacto Verde, el Reglamento de Baterías de la Unión y la Ley de Industria Net-Zero.